Por: Maria Fernanda Horcasitas Merida.
La Europa del siglo
XVI vivió una constante lucha, tanto como política, social, económica y
religiosa; los altos mandos eclesiásticos tuvieron una disputa desde el inicio
hasta el final de la reforma y contrarreforma. España también presenció este
acontecimiento con el reinado de Felipe II, quien mantuvo un control ideológico
en la cultura, en las universidades, y persiguió a todos aquellos que no
siguieran el cristianismo no protestante con la inquisición, esta práctica fue
justificada y avalada por los reyes.
En el ámbito educativo la
reforma protestante planteó, la instrucción universal y se acercaron posturas
humanísticas, mientras que también planteo la formación de las escuelas
populares destinadas a las clases pobres, esta instrucción formaba provenía por
parte de las autoridades laicas, el protestantismo elaboro una nueva
metodología en la educación, ya que nuevos objetivos se realizaron en marcos
políticos y administrativos y en las diferentes maneras de la educación.
Martin Lutero la figura
central del protestantismo, fue un de los principales pensadores de la Europa
Renacentista, como se dijo antes, este movimiento no solamente fue religioso,
sino educativo, puesto que fundó bastantes escuelas. Fue monje y catedrático en
la Universidad de Wittensberg, demostró genialidad apasionada, por lo que su
popularidad fue aceptada por los pueblos europeos. Por otro lado, las ideas que
afirmo fueron: “la negación de la validez de la tradición cristiana para acudir
directamente a los evangelios, redujo solamente a la eucaristía y al bautismo
como válido para el magisterio de Cristo. “ la única libertad posible para el
hombre es la sujeción de Dios”[1].
La pedagogía al igual
que sus principios religiosos fue realzar el orden social y el estatal, mas no
el de la iglesia, el Estado es el defensor de los intereses de la comunidad,
para Lutero el Estado es el tutor de la juventud, la escuela debía ser convencional
y en ella se traducirían textos bíblicos, asimismo planteo una educación
democrática, obligatoria y gratuita, no obstante puso los valores de la
cristiandad en el centro del sistema, pero se basó en un sentido libertario y
social.
Los colegas de Lutero,
los cuales son Felipe Malansthon, Trotzendorf y Sturm, Calvino, Zwinghio, todos
ellos profesaban una educación humanista, fundaron colegios y la educación la
hicieron más amena, sin embargo, la educación nunca fue humanista realmente
como solían decir, ya que, se volvió a poner a Dios como el centro del ámbito
de la formación académica, los logros fueron que las instituciones educativas
eran laicas, la iglesia no ingería en la toma de decisiones, sino era el
Estado, otro de los logros es que la educación llego a todos los sectores
sociales.
La iglesia desde un
principio se mantuvo al margen por profesar la doctrina de la fe y la moral,
teniendo una formación excepcional en los educandos, pero fue a raíz del Trento
que los católicos se empezaron a ganar terreno por sus acciones, puesto que, elevaron
la cultura y la formación mediante la creación de conferencias, además de que
se preocuparon por la juventud, la niñez y la adultez de las personas. Todo
ello con el objetivo de desplazar a la iglesia protestante. En tanto que, unos
años después llegó Ignacio de Loyola con la pedagogía Jesuita, la cual tiene
como finalidad: “el intento de hacer suyo a los maestros y a los discípulos el
modelo y ejemplo de formación autodidacta que siguió su fundador”[2],
con ello los jesuitas propagaron un documento llamado Ratio, este tenía dos
sectores como estudio, uno inferior y otro superior, en el primero se estudiaba
las humanidades y la gramática, y en el segundo la formación teológica y
filosófica. Otros católicos eran: Calasanz y La Salle y ellos manifestaban que
se debe combatir la ignorancia por un sentido religoso, la escuela es vida y en
ella se debe forma el hombre cristiano.
En conclusión, en el
lapso de la reforma y la contrarreforma se mantuvo una disputa por las religiones,
la reforma protestante venía a cambiar el panorama católico, sin embargo, el
cristianismo no protestante justifico la muerte de aquellos que eran
protestantes con la inquisición, sin embargo, en el ámbito educativo el protestantismo
la toma de decisiones en los centros educativos ya no dependían de la iglesia,
sino de un Estado Laico, pero nunca fueron tan humanistas como lo decían,
mientras que en el catolicismo la iglesia seguía tomando todas las
determinaciones. En fin, más allá de ver quien educaba mejor, esta lucha entre
ambas sectas dejo por un lado, la secularización de las instituciones
educativas, y por el otro la educación trata de llegar a las clases no
educadas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario